Dificultad
Fácil ✌Distancia
4 kmDesnivel
250 mDuración
2hDescripción
Bonito y familiar paseo para visitar una de las mejores pozas de Cataluña, el Salt del Molí. Junto con su cascada y el camino a orillas del río hacen de esta ruta ideal para hacer en familia y aprovechar el verano para refrescarse o en invierno para ver su cascada congelada.
Se trata de una ruta circular muy sencilla e ideal para realizar con toda la familia, tanto en días de frío como de calor.
Mapa de la ruta
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Recorrido detallado
Empezamos esta excursión delante del pabellón municipal de Vidrà donde apenas atravesando la carretera veremos una pista forestal claramente señalizada hacia el Salt del Molí.
En este primer tramo pasaremos por delante de una granja y una empresa de maderas, y poco a poco iremos descendiendo y adentrándonos en el bosque siguiendo esta pista ancha y fácil hasta llegar a la depuradora.

Inicio de la ruta en el pabellón municipal de Vidrà

Caminamos por la pista hasta la depuradora
A partir de aquí nos adentramos por un sendero bastante fácil de transitar por donde llegaremos a una alta torre de tensión, donde veremos unas buenas vistas del valle y un pequeño cartel que nos indica el 'Molí nou'.
Bajamos por el camino un poco más pronunciado y llegamos al río Ges, donde veremos al otro lado la antigua construcción del molino de piedra, ahora muy deteriorado por el paso de los años.

Desvío hacia el 'Molí nou'

Río Ges y antiguo molino de piedra
Avanzamos por un pequeño sendero muy bonito, ya que vamos todo el rato por la orilla del río y rodeados de mucha vegetación.
A pocos metros nos encontramos la primera postal de esta ruta, el puente de Salgueda, descrito como puente románico pero grabado con la fecha de 1846.

Avanzamos por la orilla del río

El puente de Salgueda, sobre el río Ges
Cruzamos el puente y continuamos siguiendo el curso del río por un pequeño sendero bien sombrío, que nos dejará en lo alto del Salt del Molí y descenderemos por una pendiente algo pronunciada.
Pronto nos encontramos al pie del espectacular Salt del Molí, una cascada de 20 metros de caída y una poza donde poder bañarse en verano o contemplarlo bien congelado en invierno.

Cruzamos el puente de Salgueda

El Salto del Molino congelado por las bajas temperaturas
Desde el salto continuaremos atravesando el río por encima de las piedras y seguiremos por el camino que sube entre los árboles, donde nos podemos fijar en las marcas blancas y amarillo del PR.
Superaremos un buen desnivel para remontar la bajada hasta el río y salir de la zona baja del valle. Una vez en el cruce giramos a mano derecha y tomamos la bajada de nuevo hacia Vidrà, llegando al mismo punto donde empezamos la ruta.

Seguimos el PR

Subida para salir del fondo del valle